14/2/23

CUANDO YA NADA SE ESPERA







Ella, que de adolescente soñaba con ser la musa de un artista. 

Ella, una mujer bella, inteligente y sobresaliente cardióloga. 

Ella, que, aunque no musa, llegó a ser amante de algún que otro escritor, actor, pintor…

Ella, que aun no sabe por qué, fracasó en cada una de estas relaciones. 

Ella, siempre, la abandonada. 

Un buen día, con cuarenta y nueve años a sus espaldas, cansada de seguir buscando su anhelo y viviendo en el más absoluto vacío afectivo, decidió volver a su ciudad natal. Allí al menos, sentiría la cercanía de algún que otro familiar, de algún que otro viejo amigo, el olor del que fue su hogar. 

Ahora sus sueños han desaparecido. Intenta acostumbrarse a esta vida mediocre de la que ya hace mucho tiempo renegó. 


Del apartado “Historias de mujeres” del libro “Historias de mujeres y otros relatos” – Mercedes Ridocci


Imagen descargada de google.

 

8/2/23

LOS FRUTOS DE TU PIEL


Desocupé mi cuerpo
rellené el hueco deshabitado
con los frutos de tu piel.
Embarqué en tus manos,
viajé de tu boca a tus entrañas
deshecha en tu sangre
enredada en el vello de tu vientre.

Viví eterna hasta tu muerte.

Mercedes Ridocci

 

 

2/2/23

EN LA DANZA DEL AMOR

En la danza de Amor
—escenario de pasiones—
a veces somos
dos vientos danzando al
acorde de un único hálito
dos llamas fundidas en
vahos de placer
dos fieras batiéndonos en
picos de luna
dos fósiles que guardan
gritos de silencio
dos cuerdas deshechas
llorando hilos.

Mercedes Ridocci

 

 

 

29/1/23

OLOR A HIERBA


El olor a hierba recién cortada
hizo parada en la estación del pasado.

En su llanura inmensurable,
dos aves entrelazan sus jóvenes y blancas alas
soñando futuros.

De vuelta vi nuestras grises alas, rozándose,
soñando pasados.


Mercedes Ridocci

 

 

28/1/23

LA ORANTE


Por detrás de la Orante,

con la rigidez del acecho
y paso condenado a muerte,
el macho apresa a la hembra
arremete su entrada sagrada.
La Orante, convulsa en placer caníbal
abandona su plegaria,
le extirpa la cabeza al macho
y con sublime orgasmo
succiona el seso reventado,
mientras el decapitado
con la carne fragmentada
derrama su espuma blanca
en el vientre de la Orante.

Mercedes Ridocci

RESEÑA de Juan Povedano Gómez a mi poemario "Arrugas de silencio"

  Agradezco muchísimo esta reseña que Juan Povedano Gómez https://www.facebook.com/juan.povedanogomez ha realizado sobre mi poemario “Ar...