7/3/23

ENCADENADOS

Siameses rivales,

atados por gruesas arterias,
cosidos por hilos de sangre,
soldados en carne abierta.

Rasgarse…, inútil intento.

Ni con tóxicas palabras,
ni con miradas rayadas
ni con helados silencios,
ni con gritos de cuchillo.

Sentencia irrevocable:
Condenados a perpetuidad
por inexpugnables y cruentos enlaces.

Mercedes Ridocci

 

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