acurrucada en sus brazos
me abraza como cuando era un bebé
¡Siento tan nítido su calor
que al alba despierto
con una sonrisa en mis labios
y una lágrima de añoranza en mis ojos!
Mercedes Ridocci
La muerte es una señora alada agazapada en el lomo perenne enamorada celosa de la vida. Desde el trono del poder otorgado por la eternida...
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